domingo, 9 de agosto de 2009

Una pequeña debilidad: La chica de rosa

Mi película favorita de John Hughes, que falleció ayer, es La chica de rosa. La vi varias veces y siempre queriendo ser Molly Ringwald, con esos conjuntos tan requetechulos que se ponía: los sombreritos, los guantes... yo hubiera querido ir así al instituto. Marcar esa arrolladora personalidad y desafiar a las rubias de la clase.

En La chica de rosa están los ochenta que hubiera querido yo vivir: ser dulce, rebelde y tener a Andrew McCarthy de pareja para el baile.

4 comentarios:

  1. Francamente, querida, me importa un rábano.
    Insuperable frase, ¿verdad?

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  2. Insuperable, aunque si usted se refiere a aquella que pronuncia Rhett Butler en la película que todos sabemos, la frase en la traducción al castellano dice: "Francamente, querida, eso no me importa".
    O, si nos ponemos puntillosos: "Frankly, my dear, I don´t give a damn", que queda muy contundente ( traducción: "Francamente, etc, me importa un carajo").

    Aunque a Scarlett le importa bien poco. Mañana será otro día.

    Saludos.

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  3. Hola hermosa, te he descubierto por un seguidor y me he convertido en fan, me encanta el cine, me he agregado a tus seguidores, este es el tercer blog,

    te leo, te sigo

    Besitos

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  4. Hola nuska, muchas gracias por seguirme. Como ves este blog lo tengo un poco abandonado porque me engancha más el otro, el de cine y D/s.

    Por supuesto, si te gusta el cine agradeceré cualquier comentario o sugerencia que quieras hacerme.

    Besos.

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